jueves, 20 de noviembre de 2014

Yo te creo, Dios!

Será posible que en ocasiones mi desconfianza sea algo desagradable? Pensando en esto, entonces comprendí lo que dice Hebreos 11:6  "Porque a Dios no le gusta que no confiemos en él. Para ser amigos de Dios, hay que creer que él existe y que sabe premiar a los que buscan su amistad".

Increíblemente, tanto tiempo leyendo este verso y nunca me había sentido tan descubierta. Como... para que negarlo, si ya de todos modos Él lo sabe?

Ciertamente hay momentos que no creo nada, que no confío en nadie que no encuentro la salida. Sí, lo confieso.

Pero de lo que no me había percatado, o por lo menos no lo había interiorizado, es que eso no le agrada mucho a Dios de mí. Bueno, sé que no me odia, pero le causa tristeza mi incredulidad.

Y tú que lees esto, sí tu mism@... como te sentirías si la persona que más amas desconfía de ti, nunca cree nada de lo que le dices y lo que le prometes lo descarta como algo que nunca va a suceder?

Imagina ahora a Dios, amándonos tanto que entregó lo más hermoso que tenía, su único hijo por ti y por mí. Sin embargo, hoy miles se levantaron en la mañana y dijeron Dios no existe, mientras que otros lo ignoraron o dudaron de su amor y bondad. Pero muchos más aún, lo herimos porque ayer recibimos una promesa y dijimos "Te creemos", más hoy dudamos que esperar en Él tenga algún sentido o lógica. Más bien, pensamos que es absurdo creer en alguien a quien no vemos. Sin embargo, hoy comprendí muy tarde en la noche que mi incredulidad le duele y que yo misma atraso el que se cumplan sus promesas en mi vida. Le crees tu a Dios siempre? o dudas aveces de su Palabra y sus propósitos ? Pues, no es muy tarde para creer. Creéle a Dios ahora mismo. Este es tu momento!!!!

No hay comentarios.:

Publicar un comentario